Compartimos un texto, producto del desinterés manifiesto por parte del DNSO, a quien le solicitamos una reunión hace exactamente 14 días, sin que hasta el día de hoy 18/09/23, tengamos respuesta. Buscamos que los Aeroclubes que organizan sus festivales, lo hagan con la seguridad operacional y jurídica necesaria. En tal sentido y por este medio le decimos nuevamente al Sr. José Luís Aseijas:
De nuestra consideración:
Por medio de la presente, y en representación de la Federación Argentina de Aeroclubes, nos dirigimos a usted en relación al pedido de reunión con carácter de urgente que le fuera formulado por esta entidad hace 14 días (04/09/23) y con relación a temas que ameritan una urgente intervención por parte de esta Administración Nacional de Aviación Civil.
Lamentablemente, hasta el presente no hemos recibido fecha de reunión alguna pese a la urgencia de los temas que aquejan a TODOS LOS AEROCLUBES DE LA REPÚBLICA ARGENTINA.
Esta falta de respuesta nos preocupa profundamente y solo puede explicar una falta de interés notoria en la aviación civil para resolver los graves problemas que aquejan diariamente a la actividad.
Recordamos que, de conformidad con los principios de transparencia, colaboración y diálogo que deben regir la relación entre las autoridades gubernamentales y las entidades representativas de la sociedad civil, el pedido de reunión que presentamos tenía como objetivo abordar cuestiones que afectan directamente la seguridad operacional y que ameritan la INMEDIATA Y URGENTE intervención de esta Administración.
El silencio y la falta de respuesta a nuestro pedido, y que no resulta ser el primero de varios, si nos remontamos a los numerosos reclamos por la entrada en vigencia de la Resolución 874/2019, todo ello nos lleva a cuestionar el cumplimiento de los deberes que como funcionario público le competen a Ud. y a sus superiores por imperio de los artículos 2 inc. 1, 2, 3, 4, 5, 8, 9, 11 del Decreto 1770/2007.
Siempre hemos priorizado el diálogo a fin de arribar a soluciones que beneficien a la aviación civil pero esta vez quien sostiene el inadmisible silencio es esta Administración, “Autoridad Aeronáutica” que cuando se promociona un festival con acrobacia o vuelos de bautismo se rasga las vestiduras atemorizando a los jefes de aeródromo o incluso clausurandolos, pero cuando se le requiere que cumpla con su rol y para el cual fue creado, prefiere el silencio y otorgar anuencias que, en los hechos, “no dejen pegado a nadie”.
Por ello, en representación de los Aeroclubes de la República Argentina instamos a esta Administración Nacional de Aviación Civil a dar una pronta, urgente e inmediata respuesta a los oportunos planteos introducidos por esta Federación, ello bajo apercibimiento de iniciar de forma inmediata las acciones legales necesarias contra esta Administración y de forma personal contra cada uno de los funcionarios públicos intervinientes que prefieren el silencio antes que velar por la seguridad operacional de nuestra aviación civil.
Lamentablemente y desde hace muchísimos años – como mínimo diez período en el que yo ingresé como Inspector de Línea Aérea – la conducción superior de la ANAC ha estado en manos de personas absolutamente ineptas, que han ocupado ese importantísimo cargo sólo como contraprestación de favores políticos. En la Institución trabaja una gran mayoría de profesionales responsables y capacitados en cada una de sus áreas, pero las buenas iniciativas naufragan en un “Mar de Dulce de Leche” generado precisamente por la ineptitud de los Administradores, que no tienen la menor idea de lo que tienen que hacer ni de cuales son sus responsabilidades. Claro que esto último no les preocupa en lo más mínimo ya que el “largo brazo de la Justicia” no es lo suficientemente largo como para alcanzar a sancionar su desidia o su dolo. Fue precisamente esta la causa por la que, luego de casi tres años de intentar – junto con otros excelentes compañeros de trabajo – de cambiar el sistema, decidí renunciar. Les deseo mucha suerte en su intento porque, el éxito será muy difícil de alcanzar mientras el Gobierno Nacional no le de a la ANAC la importancia que debería darle, siga poniendo inútiles al frente y continúe tolerando los embates de ATE, el gremio que con un eficaz trabajo de zapa, contribuye a trabar el ya de por sí mal funcionamiento de los orgenismos estatales. Les mando un fuerte abrazo aeronáutico. Sergio Di Stefano.